Tuesday, June 06, 2006

Román habla como juega, dice mucho sin gritar nada

Riquelme contó que no tienen pistas sobre la formación del debut. Compararon su seriedad con la sonrisa permanente de Ronaldinho y el mencionó a Zidane. Elogió a Pernia y se alegró por la vuelta de Verón.

DUDA. "¿Jugará el mismo equipo que enfrentó a Angola? Nosotros no lo sabemos. El técnico no nos cuenta." (G. García Adrasti / Enviado especial)

Fuente:

Horacio Pagani

El clima del Mundial ya se vive en las adyacencias de la Selección, en la pulcra población de Herzogenaurach. En cuanto se abren las puertas de la concentración o de su cercano campo de entrenamiento, la presencia popular es masiva. Muchísima prensa, claro. Pero también argentinos de allá y de acá. Y alemanes. Y neutrales. Y curiosos. Y curiosas.

Después de la práctica, con casi nada de fútbol para observar, se ofreció una conferencia de prensa. Juan Román Riquelme y Gabriel Heinze tomaron la palabra. Y, según el sistema, no hubo primicias para nadie. En estos casos las declaraciones suelen ser formales. Sin quejas, sin denuncias.

Pero vale la pena observar cómo cada uno exhibe su personalidad ante el aluvión de requerimientos. Y es particular el caso de Román Riquelme. Un viejo dicho del fútbol —con sostenedores y con detractores— anuncia que "se juega como se vive" en una pretenciosa definición filosófica. Con Riquelme puede decirse, sin margen de error, que "declara como juega". Con simplicidad, con frescura, con inocencia intencionada, atento a los códigos. Como si se tratara de un futbolista hablando a la salida de un picado.

Era difícil sacarle frases en sus primeros tiempos de profesional en Boca. Solía esconderse, escudado en su timidez, pasaba abrazado a Pablo Aimar, su amigo, delante de los periodistas, para evitarlos. Su paso por España lo fue cambiando. Maduró en todo sentido, a punto de cumplir los 28 años (el 24 de junio). Y nació un día antes de que la Selección argentina conquistará su primer título mundial. Como si desde ahí se hubiera instaurado su relación sagrada con la pelota. Pero también aprendió a contestar.

Le preguntaron, de entrada, su opinión sobre el partido de Costa de Marfil del día anterior. "No lo vi. Teníamos el día libre y aprovechamos para tomar mate." Y después agregó para que nadie dude de la solidez del grupo que integra: "Estamos tranquilos. Vamos a hacer un buen Mundial. Y una prueba es que ayer, que podíamos salir, casi todos nos quedamos en la concentración." Lo interrogaron sobre la particularidad de los africanos en relación con otros rivales y fijó una sentencia de su sello: "El fútbol es uno solo y se juega de una sola manera. Nosotros tenemos una idea clara de lo que queremos, jugamos al ataque, buscamos ser protagonistas y crear situaciones de gol. Nos criticaban porque nos llegaban mucho y Angola casi no nos tiró al arco. Mejoramos en eso. Y seguiremos mejorando." En tono de broma, le dijeron que Ronaldinho siempre se ríe y que él no parece disfrutar. Está siempre serio. "Zidane no se ríe nunca y es el mejor del mundo desde hace diez años. Yo tengo la misma cara cuando gano o cuando pierdo. Cada uno es como es. Soy muy feliz jugando al fútbol. Y me siento muy feliz aquí, con mis compañeros." Aclaró que era muy importante ganar el primer partido "porque uno arranca más seguro para asegurarse la serie. Hay que ganarlo". Precisó que a él le da lo mismo jugar con cualquier compañero: "Todos somos diferentes. Si le encontramos la vuelta, vamos a andar bien."

"Todos nosotros tenemos la ilusión de levantar la Copa", repitió. Y tiró halagos para Mariano Pernía, que estará con España. Y para Sebastián Verón, que jugará en Estudiantes: "Es bueno que vuelva al fútbol argentino. Es un grande. Y mejorará el nivel del campeonato."

Lo que dijo
SOBRE ESPAÑA
Pequeño secreto

"Es cierto que en España mojan las canchas para que el juego sea más rápido. Cuando llegué, tardé dos meses en adaptarme a eso. Ahora me tengo que adaptar cuando voy a la Argentina. Pero, bueno... En el fútbol uno se acostumbra a todo."

SOBRE ITALIA
La corrupción

"No sé muy bien cómo son los problemas que hay en Italia. Algo de lo que pasó nos cuenta Cambiasso. Pero, al margen de ese problema, ellos tienen buen plantel. Si Totti anda bien hará un buen campeonato."

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